Querido PPK, recuerda que la situación en el que se encuentra tu gobierno frente al fujimorismo, no es por el Ministro Jaime Saavedra; él es solo la carnada, el pretexto para que quede sentado quien manda y gobierna en el Perú.
Los que te dicen lo contrario, se basan en los libritos que estudiaron en la maestría de política. Dicen cosas que nacen de sus diálogos de café en un ruidoso restaurante limeño.
No permitas que el fujimorismo te pisotee, porque a partir de tu rendición, serás un fantasma penando en Palacio de Gobierno. Camina por la calle y conversa con la gente y notarás que no estás solo, que tienes a millones de peruanos que quieren un país donde impere la decencia, la justicia y la libertad.
¿Recuerdas que tus seguidores jugaron a la campaña del miedo durante las elecciones en el que saliste ganador?
¿Estás consciente que hoy eres Presidente porque ganaste, muy a pesar tuyo, gracias a que los demás (no tus partidarios de balcón y salón), nos la jugamos por ti desde el lugar y tribuna donde nos fue posible apoyarte?
Esos que promovieron el miedo durante la campaña, hoy te piden que cedas, que no pongas en riesgo la gobernabilidad por una persona. No te dan valor, no te acompañan hacia la puerta; te susurran orinándose en el pantalón, atrapados en el miedo. ¡Arrójalos de tu lado!
No tienes congresistas enrolados en tu visión, lo que tú tienes, querido e ilustrado PPK, son despistados y profesionales de la política que saltan de un lado a otro, cual monitos desesperados por el plátano pelado. Son buenos empresarios o profesionales, pero no tienen visión de país. Tampoco les interesa tenerlo.
Tú no tienes líderes a tu lado, sin embargo, son mejores frente a los impresentables del fujimorismo. Tú no tienes Becerril, Galarretas o Chacón, menos mal; pero sí tienes profesionales que no saben de historia, de política y de tomar riesgos.
Los que te rodean no te protegen, ellos son perritos falderos. Te entregan en bandeja, son los Judas que cumplen una mortal función, pero sin trascendencia, sin enseñanza. Burdos.
Entonces, querido PPK, analiza bien. Toma decisiones. Adiós apegos. Hoy es el tiempo de marcar la diferencia de tantos administradores (presidentes) y ladrones que gobernaron este país.